Mortificaciones

Estamos en cuaresma y la Santa Iglesia nos pide a los fieles católicos que hagamos algún tipo de sacrificio como agravio por los pesares que hubo de pasar Nuestro Señor Jesucristo durante Su pasión y muerte.

Mi sacrificio de este año, mi mortificación, ha sido ofrecer al cielo las aburridas corridas de toros a las que llevo asistiendo desde hace una semana si rechistar, aguantando estos tostones estoicamente.

Con el día de ayer creo que me he ganado el cielo...

3 comentarios:

  1. Con esta entrada cortita lo has bordao.
    Por fin terminó la Feria.
    Para que yo diga esto, ya puede haber sido mala, ya...

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  2. ser torero es el oficio más dificil del mundo, no conozco otro, de verdad, los toreros hacen lo que nadie se atreve a realizar y a todos nos gustaria hacer, por eso los toreros son heroes populares , pertenecen al pueblo y son patrimonio del pueblo, no lo olvides, siempre hay algo que apreciar en el arte de la tauromaquia.

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  3. El Sr.Sabateret tiene más razón que un santo y comparto su opinión sobre los méritos y heroicidades de los toreros, que muy pocos estamos capacitados para hacer y sobre todo porque a muy pocos ,como decía Cañabate,les deja su "mamá",señalando al decir mamá el corazón.Todo eso creo que es verdad y dificil de rebatir.
    Naturalmente supongo que se refiere el Sr Sabateret a TOREROS que torean TOROS de ahí su gentilicio.
    Lo que sucede en la casi totalidad de los casos en la actualidad, rebajan al héroe popular a vulgar sacamantecas estafador y desde luego dejan de pertenecer al pueblo (engañado y puteado tarde tras tarde) para entrar con pleno derecho a pertenecer a la mafia taurina que los apodera.
    Ahí ni hay arte ni tauromaquia que valgan se pongan como se pongan.

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