“Rectificar es de sabios”…. también reza el refranero.

El pasado martes publiqué un reproche hacia los toreros José Tomás y Enrique Ponce por no comparecer en el próximo San Isidro.

Me parece que en Madrid, la primera plaza de toros del mundo, por el bien de todos estos dos toreros debían de actuar, de dar la cara.

José Tomás es un torero que defiende mucho lo suyo y es difícil de contratar, pero no podemos negar que para él Madrid es algo importante y siempre ha dado la cara allí, es cuestión de negociar.

Lo de Enrique Ponce me extrañó aún más, si bien es cierto que él el año pasado insinuó que esa podía haber sido su última tarde en Madrid, también lo es que tratándose de Ponce eso sonaba más a retirada que a otra cosa, en pocos días iba a estrenar paternidad e imagino que se estaba plateando muchas cosas en ese momento.

Lo que es rigurosamente cierto es que Ponce en 20 años no ha dejado de dar la cara en Las Ventas nunca y que ha hecho multitud de gestos para con esa Plaza.

Con las últimas informaciones sobre todo este asunto cambio de opinión al respecto. Los empresarios de Las Ventas, la familia Martinez Uranga, los taurinos “Choperitas”, están ejerciendo más que nunca de eso, de taurinos, y si hay algo he aprendido en estos años es que un taurino por definición es un antitaurino. No hay cosa que haga más daño al mundo del toro que un taurino profesional, ¡nada!

José Tomás y Enrique Ponce no han hecho otra cosa que exigir unas condiciones acordes a la dignidad que tras muchas tardes en esa plaza se han ganado, no han hecho otra cosa que exigir de partida lo que creen que es justo para ellos y según parece por parte de la empresa no se ha querido negociar.

Lo mismo le ha ocurrido a Julito Aparicio, que después de pagar el año pasado con una gravísima cornada en esa plaza este se ve fuera.

Como los toreros demuestran lo que son en la arena, Simón Casas, el apoderado de Julito precisamente, ha ofrecido un mano a mano a Ponce y José Tomás en Nimes.

Un mano a mano entre estos dos sí es bueno para todos y si es en Francia casi mejor, esperemos que acepten el reto….

2 comentarios:

  1. Lo comente en otro blog, para mí los antitaurinos no son los que gritan y silban en la calle, sino los engominados y encorbatados señores que se pasean por los callejones de las plazas: empresarios, políticos, ganaderos "de postín", apoderados, y otros... vividores.

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  2. Plantea la pura realidad Maestro y Simonet lo demuestra, pero Simonet sea taurino de los malos o de los menos malos por lo menos trabaja y arriesga, los otros empezando por Taurodelta a aprovechar la inercia y borreguez de la sociedad actual y no trabajan ni para contar billetes, contratan un amuense que haga el esfuerzo, mas claro lo de Zaragoza que ni pasan por alli y la dejan en manos de un sospechoso Zorita y un impresentable ignoprante Polo.

    Realmente estos son los verdaderos antitaurinos que se cargaran la fiesta.

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