Curro Díaz, torero elegante como pocos, cuajó una muy estética faena a su primero de El Ventorrillo, toro de gran calidad aunque algo bajo de casta, al que se adaptó a la perfección el torero. En su segundo faena importante, con teclas el toro, Curro subo tapar las dificultades y sacarle todo lo que tenía. Manejó la espada como suele hacerlo y tres orejas. Es figura en su tierra y lo demostró, tiene nivel para estar en las grandes ferias.
Las circunstancias de Adrián de Torres son otras y evidenció su falta de experiencia. Tuvo en su muleta el lote más completo de la feria por encastado, el primero le superó ya de salida, gracias a Dios le correspondió su lidia a Jose Antonio Carretero quien templó al toro con su capote y nos enseñó sus virtudes. El sexto embestía largo, metiendo bien la cara y con mucha trasmisión, todo lo que se le hiciese iba a llegar con fuerza a los tendidos, ¡toro de triunfo grande! Adrián tiró de valor y cuajó alguna tanda de derechazos largos y de mano baja, lo que pedía el animal que poco a poco se fue haciendo el dueño del ruedo llegando a enganchar muy feamente al nuevo torero linarense que milagrosamente salió ileso.
Buena la corrida de El Ventorrillo y buena feria la de este 2013 en Linares donde han salido toros, en sus dos festejos, de mucha calidad y algo raro: ¡encastados! Cuando sale el toro “toro” pone a cada uno en su sitio. De esta feria salen dos toreros reforzados.
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