Se acabó La Feria de Julio y hoy, el último día, hemos visto lo mejor, el segundo par de banderillas de José Manuel Fernández “Alcalareño” al quinto de la tarde, su primer par ya había sido importante, pero el segundo ha sido el mejor par de La Feria, se ha reunido en el mismo centro de La Plaza y ha salido andándole al toro de una forma tan torera como solo recordaba al maestro Manolo Montoliú. De lo que he visto estos días, que no ha podido ser todo, sin duda lo mejor.
Para seguir con el esperpento en que se ha convertido esta Plaza de Toros han echado por falta de trapío a “los Samueles”, el protagonista de este hecho ha sido el equipo veterinario, el mismo que dejó saltar al ruedo un eral en el día de ayer. Si me atengo a su criterio que, a los hechos me remito, es ninguno, los de Samuel Flores eran unos toros dignos de cualquier plaza de primera, lo indigno es lo que nos han dejado ver.
Acusan al ganadero de manipular pitones, si eso es así se denuncia y se sanciona, no se pone en duda el prestigio de un ganadero.
El remate ha sido que el señor presidente, sin que nadie se lo pidiese, ha concedido la vuelta al ruedo a un muy noble quinto toro de Manolo González. Noble pero en el tercio de varas ha recibido dos picotazos para pasar el trámite, un toro al que no se le ha probado su bravura en el caballo no se le puede premiar, esto es algo que sabe todo aficionado, cosa que obviamente no son los presidentes de Valencia.
Menos mal que aún quedan toreros como “Alcalareño”, Curro Molina y Domingo Navarro que hacen que incluso en tardes oscuras podamos disfrutar de lo bello que es este Arte cuando se ejecuta con pureza, dignidad y mucha torería. ¡Gracias a los tres!
Olé, maestro!
ResponderEliminarsi señor, el toreo es un Arte con mayusculas.MA
ResponderEliminar